La nieve no fue motivo suficiente para suspender la excursión programada. Así que, los seis asistentes (cuatro perros, David y Ángel), emprendimos la subida hacia la Atalaya de la Sierra de La Encantada.
Tras pasar por la Atalaya, hacemos un largo ascenso hasta hacer cumbre en el Pico del Cerrón (vértice geodésico de la Sierra de Jubrena).
Para esas alturas, el viento arrecia. Y la nieve cayendo, nos obliga a abrigarnos bien. Paramos unos minutos a descansar y hacernos la foto de grupo, y emprendemos la bajada dirección al viejo Canal de Carlos III. La pendiente es pronunciada y el descenso se ha hecho delicado, y la orientación, mediante brújula.
El regreso a lo largo del Canal ha sido un agradable paseo.
En definitiva, una jornada para disfrutar de la nieve y de la montaña en todo su esplendor. Una terapia natural para tonificar cuerpo y alma.
Os esperamos en la próxima. No faltéis.
Ángel.
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